jueves, 4 de diciembre de 2008

La Educación no es una prioridad (V): ¿Porqué no somos trilingües ya?

A lo largo de toda su etapa educativa -desde primaria hasta 2º de Bachillerato-, todos los alumnos que acceden al sistema educativo valenciano han dado un mínimo de tres horas semanales de lengua extranjera. En su gran mayoría, los alumnos optan por el inglés y, en menor medida, por el francés.
Si hacemos cuentas, una persona que haya seguido todos los cursos habrá estado un mínimo de ¡12 años! recibiendo clases de inglés, o francés. Esto es, por sí solo, algo magnífico, ya que así se aseguraría que nuestros hijos saliesen del sistema educativo con un nivel de inglés muy alto, de modo que sería innecesario implantar la docencia en inglés en algunas asignaturas.

Sin embargo, es patente y notorio que la gran mayoría de nuestros hijos salen de 2º de bachillerato con un nivel en inglés que no les permitiría ni siquiera traducir una canción pop de moda. Eso lo sabemos todos los que nos dedicamos a la Docencia.
Y nuestras autoridades educativas también lo saben.

Nuestros hijos para adquirir un nivel de inglés adecuasdo han de estudiar este idioma fuera del colegio o del instituto. Han de estudiarlo, en academias privadas, para poder adquirir un nivel adecuado en este idioma.

¿Qué es lo que falla en la enseñanza de las lenguas extranjeras en nuestro sistema educativo?. ¿Los profesores?. Obviamente, no. La profesionalidad de los docentes es notable. Hay que cambiar los programas y la forma de orientar la asignatura.
Hay muchísima gramática que se repite año tras año. El alumnado no empieza a redactar y a escribir freases más o menos largas, hasta que no llegan a 2º de Bachillerato.

Si las academias privadas funcionan tan bien a la hora de enseñar idiomas a los alumnos, ¿porqué no se cambia el sistema y la programación, siguiendo el modelo de dichas academias?. La cantidad de dinero que la sociedad se ahorraría sería grandísima y, sobre todo, la competencia que adquirirían nuestros hijos sería excelente. No haría falta recurrir a meter en algunas asignaturas hasta 2 profesores (uno de ellos traductor al inglés) para poder impartirlas.

Por mucho que se le llenen las bocas a nuestras autoridades acerca de lo trilíngües que vamos a salir dentro de unos años, y que vamos a ser la envidia del mundo planetario todo, la realidad es que con menos fanfarrias y oriflamas se podría hacer un trabajo mucho más efectivo.

Pero, como ye he dicho muchas veces, la Educación no es una Prioridad.